Mucho más que un material didáctico.
Hace unos días Gabriela Ortega tuvo el gusto de recibir en el Colegio Montessori de Cancún, a un grupo de jóvenes estudiantes de la UNID, interesados en conocer el Material de Desarrollo Montessori y descubrir el encanto que los niños encuentran al trabajar y aprender, de manera lógica, utilizando sus sentidos, para conectarse con el concepto que el material les enseña.
María Montessori elaboró un material de desarrollo específico que constituye el eje fundamental para el aprendizaje e implantación de su método.
No es un simple pasatiempo, ni una sencilla fuente de información, es más que eso, es material de desarrollo para enseñar. Están ideados a fin de captar la curiosidad del niño, guiarlo por el deseo de aprender. Para conseguir esta meta han de presentarse agrupados, según su función, de acuerdo con las necesidades innatas de cada alumno.
Estos materiales de desarrollo pueden ser utilizados individualmente o en grupos para participar en la narración de cuentos, conversaciones, discusiones, esfuerzos de trabajo cooperativo, canto, juegos al aire libre y actividades lúdicas libres. De esta forma asegura la comunicación, el intercambio de ideas, el aprendizaje de la cultura, la ética y la moral.
En general todos los materiales Montessori poseen un grado más o menos elaborado de los cuatro valores: funcional, experimental, de estructuración y de relación.
Otra característica es que casi todo el equipo es autocorrectivo, de manera que ninguna tarea puede completarse incorrectamente sin que el niño se dé cuenta de ello por sí mismo. Una tarea realizada incorrectamente encontrará espacios vacíos o piezas que le sobren.
El niño realiza cosas por sí mismo, los dispositivos simples, y observa las cosas que crecen (plantas, animales), abren su mente a la ciencia. Los colores, la pintura, papeles de diferentes texturas, objetos multiformes y las figuras geométricas de tres dimensiones las incitan a la expresión creativa.
Los materiales sensoriales, por ejemplo, están agrupados por cada sentido
El gusto y el olfato. Las plantas y los perfumes proporcionan la gama de los olores. Aquí el material está constituido naturalmente por productos culinarios, con el complemento de una serie de botes con sustancias olorosas, otra serie idéntica ha de ser clasificada por comparación, de manera que se pueda asegurar el reconocimiento exacto de los olores.
El tacto. Tiene en cuenta el material Montessori el sentido táctil, en todas sus formas (tablillas y rugosidades), así como el sentido térmico (botellas con agua a diferentes temperaturas), la percepción de las formas, etc.
La vista. Percepción diferencial de las dimensiones, colores, volúmenes y formas. Todos y cada uno de los materiales, fuero diseñados siguiendo una base científica, con absoluta precisión matemática.
El oído. Discernimiento de los sonidos con cajas metálicas, campanillas, silbatos y xilófonos.
Por lo tanto, se puede decir que el papel de los maestros (guías) es el de presentar a cada niño o niña de forma individual la forma de utlizar los materiales. Lo más destacado es que no impone lecciones a nadie, su labor se basa en guiar y ayudar a cada niño de acuerdo a sus necesidades, y no podrá intervenir hasta que ellos lo requieran, para dirigir su actividad psíquica.
María Montessori llama a la maestra, directora, que ha de estar preparada internamente (espiritualmente), y externamente (metodológicamente). Ha de organizar el ambiente en forma indirecta para ayudar a los niños a desarrollar una «mente estructurada».
Los niños esta llenos de posibilidades, pero quienes se encargan de mostrar el camino que permita su desarrollo es el «director, directora», que ha de creer en la capacidad de cada niño respetando los distintos ritmos de desarrollo. Esto permite integrar en un mismo grupo a niños deficientes con el resto, y a estos con los que tienen un nivel superior.
La idea de Montessori es que al niño hay que trasmitirle el sentimiento de ser capaz de actuar sin depender constantemente del adulto, para que con el tiempo sean curiosos y creativos, y aprendan a pensar por sí mismos.